¿CÓMO LIMPIAR EL SUELO DE CERÁMICA?: TODO LO QUE DEBES SABER

Si no sabes cómo limpiar el suelo de cerámica correctamente, además de provocar que no luzca un aspecto radiante y con brillo, estarás acelerando su deterioro. 

El proceso de mantenimiento de este tipo de suelo es bastante sencillo. Aun así, es necesario tener en cuenta ciertas pautas, y escoger determinados productos y materiales que sean compatibles.

En este artículo te explicaremos cómo debes limpiar el suelo cerámico paso a paso.

¿Por qué elegir un suelo cerámico?

Puede que estés barajando la opción de escoger un suelo de cerámica para tu hogar. Si aún no te has decidido completamente, te mostramos la cantidad de ventajas que puede ofrecerte este material:

  • Tiene una gran resistencia y durabilidad en el tiempo.
  • Su cuidado es muy sencillo. Simplemente basta con escoger los productos adecuados para no dañarlo. 
  • Son fáciles de instalar.
  • La materia prima de la que está compuesta la baldosa proviene de un producto natural.
  • Tiene propiedades antibacterianas, por lo que es una excelente opción para personas con alergias. 
  • Debido a su carácter impermeable suele escogerse para superficies que están en contacto con el agua o cerca de ella.
  • También son antideslizantes, de modo que evitará que resbales.
  • Otra de las ventajas es que presenta una infinidad de diseños. Tiene una gran gama de colores, acabados, tamaños, etc.
  • Puedes conseguir un efecto madera, piedra, y otros materiales delicados. 
  • Se utiliza tanto en zonas interiores como exteriores. 

Cómo limpiar el suelo de cerámica correctamente

A continuación, veremos cómo limpiar el suelo de cerámica paso a paso para que mejores su aspecto y consigas aumentar su durabilidad. 

  1. En primer lugar, barre con cuidado toda la superficie para que quede exenta de suciedad y de polvo. Puedes utilizar la aspiradora, o bien, un cepillo de cerdas suaves.
  2. Friega el suelo con la fregona o con un paño de algodón, mezclando el agua con algunos de los productos que te proponemos más adelante. 
  3. Solo debes frotar de forma más enérgica e insistente aquellas zonas en las que haya suciedad incrustada o manchas. Puedes utilizar un cepillo adecuado para conseguir que se eliminen de forma definitiva. 
  4. Enjuaga la suciedad con agua limpia.
  5. Una vez realizado todo este proceso, con la ayuda de una mopa o trapo seco podrás sacar un mayor brillo.

Materiales que puedes utilizar para limpiar un suelo cerámico

En cuanto a los materiales y productos aptos para limpiar tu suelo de cerámica, recomendamos los siguientes:

  • Utiliza trapos de algodón. Es cierto que la fregona resulta ser un método más cómodo, pero con los paños podrás acceder con mayor facilidad a todas las partes de la baldosa. Una buena opción sería intercalar el uso de ambos materiales.
  • La lejía desinfecta y elimina la suciedad de la superficie.
  • Existen cepillos de púas suaves especializados para limpiar este tipo de suelo. 
  • En caso de que en tu hogar haya animales o niños pequeños, puedes sustituir la lejía por vinagre. Esta es una fórmula que se lleva utilizando desde hace mucho tiempo. Gracias al vinagre conseguirás una desinfección óptima y aportarás al suelo un brillo inigualable. Te recomendamos mezclar vinagre blanco con agua. Para evitar la concentración de su olor, puedes añadir un poco de ambientador con alguna esencia que te guste y, por supuesto, ventilar la habitación. 
  • El bicarbonato de sodio mezclado con agua tiene un poder desengrasante.
  • Otro producto muy efectivo es el amoniaco. Eso sí, debes tener mucho cuidado con su manipulación, ya que presenta reacciones irritantes en la piel. Para protegerte ponte siempre guantes.
  • También es una buena opción utilizar limpiacristales. Inserta el producto en un pulverizador. Una vez que lo eches en el suelo, frota la superficie con el paño de algodón.
  • Por último, tu suelo cerámico conseguirá lucir un buen aspecto si lo limpias con vapor de agua. En este caso, debes provocar vapor en la habitación o estancia que quieres limpiar, por ejemplo, calentando una olla de agua y cerrando todas las puertas y ventanas. A continuación, seca el suelo con el paño para evitar que resbale. 

Ahora que ya sabes cómo limpiar el suelo de cerámica paso a paso y qué productos materiales debes utilizar, seguro que consigues que tus baldosas brillen como el primer día. 

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